AYÚDEME Dr: -No tengo ganas de hacer nada


Ayúdeme doctor…

No tengo ganas de hacer nada..!

Casi de repente sin darnos cuenta, llega un día en que no tenemos deseos de levantarnos, y sentimos que la cama es un buen refugio del que salir es toda una aventura, y donde el mero hecho de pensar en levantarse, arreglarse y salir a calle, resulta difícil o se ve como una tarea imposible.

Puede también, que en momentos del día
nos invada una angustia inexplicable, o sintamos unas
tremendas ganas de llorar, sin motivo aparente.

Muchas veces estos sentimientos se ven acompañados por la falta de apetito y por una profunda fatiga y sensación de debilidad. Y si encima nos cuesta dormir, esas noches casi eternas son una estupenda oportunidad de que nuestra cabeza se vea asaltada por pensamientos -repetitivos e incontrolables, de menosprecio, incompetencia, culpabilidad, autocrítica y negatividad, en los que interpretamos lo que hemos sido y somos, recordamos los malos momentos que estamos viviendo y nos abate el futuro negro que intuimos-.

Y puede también que desde hace ya un tiempo nos hayamos ido alejando de los amigos y de la familia, y donde haya días en los que no tengamos ganas de ver a nadie, donde preferimos estar solos, y esto a su vez nos -vaya llevando a un profundo sentimiento de soledad y abatimiento, donde no queremos estar con nadie, pero tampoco podamos estar con nosotros mismos-.

Y cuando esto representa nuestro día a día ¿qué nos está pasando?. Pues lo más probable es que estemos ante una -depresión-. Y ante la depresión hay que actuar, ya que supone un deterioro importante en la calidad de vida de las personas, que en sus formas más graves, lleva incluso a preferir morir en lugar de continuar con una vida con la que sienten que ya no pueden.

-La depresión hace que uno se sienta agotado, inútil y desesperanzado. Estas formas negativas de pensar y sentirse, hacen que las personas se vean muchas veces en un túnel sin salida-. Sin embargo, es importante entender que las maneras negativas de ver las cosas -son parte de la depresión y que no reflejan, del todo, la realidad de una forma objetiva-.

Será necesario desarrollar modos de pensamiento más positivos, pero sobre todo más objetivos y realistas, que reemplacen los pensamientos negativos que son parte de la depresión. -De modo que los pensamientos relacionados con la culpa, ser inútil, la autocrítica, etc., vayan dando paso a un mayor respeto, aceptación de uno mismo y en definitiva, a un aumento de la autoestima y el ánimo-.

-Es importante fijarse metas realistas, sin tratar de asumir una cantidad excesiva de responsabilidades, y sin buscar ser quiénes éramos y cómo éramos antes de la depresión-, sino viendo desde donde partimos en este momento. También lo es involucrarse en actividades que nos ayuden a sentirnos mejor, pero no por el mero hecho de entretenerse, sino de participar en actividades que sean valiosas para uno mismo.

-Puede ayudar dividir las metas en partes pequeñas, estableciendo prioridades y valorando más lo que se es capaz de hacer, -que lo que se es incapaz de realizar-. No esperes que tu estado de ánimo mejore de inmediato, sino que es un camino largo y que habrá que recorrer poco a poco. Sentirse mejor lleva su tiempo-.

En cuanto al tratamiento de la depresión, la orientación cognitivo-conductual tiene una larga tradición y probada eficacia.

Las terapias constituyen alternativas válidas que nos permiten a los psicólogos ofrecer opciones de tratamiento eficaces, para mejorar la calidad de vida de las personas con depresión.

Para ello, pide ayuda e
intenta encontrar a -la persona que creías perdida-.

 

Fernando Bermejo.
Artista-Kris Knight